El cabello, al igual que las uñas y la piel, tiene necesidades nutricionales específicas para estar sano. Está compuesto principalmente de queratina, una proteína que lo protege de las agresiones (UV, contaminación, etc.) y lo hidrata. Pero esta se agota rápidamente.
No se encuentra queratina en los alimentos, pero ciertos nutrientes favorecen su síntesis, ¡por lo que conviene privilegiarlos!
Betacaroteno, proteínas, vitaminas B, hierro y zinc determinan la belleza y la salud del cabello. ¡Por eso, para tener un cabello bonito y fuerte, es esencial consumir regularmente alimentos que los contengan!
Incluso cuando nos alimentamos de forma equilibrada, puede ser difícil consumir suficientes nutrientes de calidad…
Además, ciertos de nuestros comportamientos, y en particular el consumo de té y café o el recurso a platos industriales, pueden dificultar su absorción, provocando carencias y problemas de salud.
Los complementos alimenticios para el cabello permiten suplir las deficiencias que afectan el estado general de la cabellera. Pueden tratar problemas de caspa y de cabello graso, de cuero cabelludo sensibilizado, de cabello seco y quebradizo, o, además, de caída excesiva del cabello.
Leer también | Los mejores complementos alimenticios para el cabello: nuestra comparativa
1. Levadura de cerveza

Utilizada para fermentar la cerveza, la levadura de cerveza se presenta en forma de un fino polvo soluble en agua y corresponde en realidad a varias cepas de un hongo microscópico.
Muy rica en vitaminas B1, B5, B8 y B9, la levadura de cerveza estimula la síntesis de queratina y refuerza la estructura de la fibra capilar. Por tanto, aumenta la vitalidad del cabello, lo hace más flexible y más resistente, al tiempo que frena eficazmente su caída.
Un verdadero concentrado de oligoelementos, la levadura de cerveza también permite purificar el cuero cabelludo y evitar que el cabello se engrase demasiado rápido. Por ello, es ideal para las personas con cabello con tendencia a engrasarse o con caspa.
¿Cómo consumirla?
Para aprovechar plenamente los beneficios de la levadura de cerveza, lo ideal es consumirla en forma de cápsulas en un tratamiento de al menos 2 meses, en cada cambio de estación.
2. Jalea real

También llamada “leche de las abejas”, la jalea real es una sustancia secretada por el sistema glandular cefálico de las jóvenes abejas obreras. Muy nutritiva, posee numerosos beneficios para la salud humana y contribuye a la belleza del cabello.
Compuesta por ácido desoxirribonucleico, ácido pantoténico, vitaminas, minerales, lípidos y antioxidantes, la jalea real actúa de forma eficaz en la regeneración celular de la fibra capilar. Por ello, está especialmente indicada para tratar el cabello apagado, seco y quebradizo, pero también para frenar su caída.
Leer también | Jalea real: la guía de compra de una farmacéutica
¿Cómo consumirla?
Para recuperar una melena en plena salud, realice un tratamiento de jalea real de al menos 3 meses, tomando una cápsula o ampolla al día. No obstante, atención: este complemento alimenticio está contraindicado en personas alérgicas a la miel, al polen y a las picaduras de abejas.
Leer también | El uso de la jalea real para la belleza del cabello
3. Espirulina

Verdadero superalimento, la espirulina no es un alga, sino una cianobacteria particularmente rica en zinc, hierro, antioxidantes, proteínas y vitaminas del grupo B. Por ello, favorece la síntesis de la queratina y el mantenimiento de la fibra capilar.
La espirulina contiene también ácidos grasos esenciales y por tanto estimula el crecimiento del cabello, al mismo tiempo que le aporta brillo y solidez.
Leer también |¿Cómo elegir bien la espirulina? Los criterios a tener en cuenta
¿Cómo consumirla?
Para fortalecer su cabello pero también sus uñas, su sistema inmunitario y su salud en general, consuma entre 2 g y 5 g de espirulina al día durante al menos un mes.
Según sus preferencias, puede consumirla en forma de polvo o copos, pero también en cápsulas, ideales para las personas que no aprecian necesariamente su ligero sabor a alga. ¡También se pueden hacer con ella mascarillas ultra-nutritivas!
Leer también | Cómo utilizar la espirulina para el cabello
4. Lecitina de soja

Formada por ácidos grasos, fosfatos, colina, vitamina B y glicerol, la lecitina de soja es un lípido derivado de la soja. Contribuye a la renovación de las células al mismo tiempo que revitaliza e hidrata el cabello. No es casualidad que la lecitina de soja figure a menudo en la composición de champús y otros tratamientos capilares.
¿Cómo consumirla?
Si se opta por cápsulas de lecitina de soja, es mejor tomarlas durante las comidas para optimizar su absorción. También se puede utilizar un champú o un tratamiento a base de lecitina de soja.
5. Polen de abeja

Formado por pequeñas semillas, el polen es recogido por las abejas en las flores donde liban para recolectar el néctar. ¡Por lo tanto, no tiene nada que ver con el fino polvo responsable de muchas alergias estacionales!
El valor nutritivo del polen de abeja es particularmente interesante para el cabello: proteínas, lípidos, vitaminas, sales minerales, oligoelementos, sustancias antibióticas y rutina, un flavonoide natural que aumenta la resistencia capilar. El polen revitaliza el cabello fatigado y ayuda a prevenir su caída.
¿Cómo consumirlo?
Se encuentra el polen en forma de cápsulas pero se vende más frecuentemente fresco o seco, para consumir en una cucharada de miel o diluido en un poco de agua.
También se puede preparar un champú fortalecedor con polen mezclando una cucharadita de polen y unas gotas de zumo de limón con su champú habitual.
6. Silicio orgánico

El silicio orgánico es un oligoelemento que se encuentra en el agua mineral y en ciertos alimentos de origen vegetal (cereales, frutos secos, setas, etc.). También está presente de forma natural en el organismo, pero nuestra capacidad para almacenarlo disminuye considerablemente con la edad.
Además de su acción sobre la estructura de los tejidos conectivos y el proceso de remineralización del organismo, el silicio orgánico también estimularía la producción de queratina, permitiendo así realzar la belleza del cabello.
¿Cómo consumirlo?
Se puede optar por consumir alimentos ricos en silicio, como el trigo integral, las legumbres (lentejas, alubias, garbanzos…), el perejil, el ajo, la cebolla, las setas o los dátiles, pero también privilegiar aguas de bebida que lo contengan.
Además, también existen complementos alimenticios de silicio orgánico en forma de soluciones bebibles o de gel.

¿Por qué tomar complementos alimenticios para el cabello?
El papel de la queratina en la salud del cabello
El cabello está compuesto en más del 95% de queratina, una proteína dura y fibrosa formada por aminoácidos, que se crea gracias al almacenamiento de células muertas. Esta los protege, en particular, contra los factores exteriores que podrían agredirlos (UV, agua de mar, etc.) y posee la propiedad de retener y almacenar el agua para hidratarlos.
La queratina también permite volver a unir las cutículas del cabello al actuar como una película protectora, aportándoles así fuerza y brillo. En resumen, ¡un cabello rico en queratina es un cabello sano!
Pero hay que saber que la queratina no se regenera y se agota a lo largo de la vida del cabello. Al ser una proteína estructural, la queratina no está presente en los alimentos, pero ciertos nutrientes favorecen su buena síntesis.
Se trata, en particular, del beta-caroteno, de las proteínas, así como de las vitaminas del grupo B, del hierro y del zinc. ¡Para tener un cabello bonito, por tanto, es esencial consumir regularmente alimentos que los contengan!

Deficiencias alimentarias y problemas capilares
Además de la queratina, nuestro cabello también está compuesto por agua, ácidos grasos, melanina (responsable de su coloración), ciertas vitaminas, así como hierro y zinc.
Además, necesitan lípidos de calidad, indispensables para su crecimiento y su elasticidad, proteínas, así como vitamina E y antioxidantes para combatir el envejecimiento prematuro. Para que estén sanos, es importante aportarles estos nutrientes en cantidad suficiente.
- En caso de deficiencia de proteínas, por ejemplo, es frecuente observar cabello áspero, apagado y seco ya que entonces les resulta más difícil retener la hidratación.
- Cuando faltan lípidos, el cabello tiende a romperse con más facilidad y a estar encrespado.
- Además, la caspa y el picor en el cuero cabelludo suelen estar relacionados con una dieta desequilibrada que provoca una inflamación cutánea.
Dossier elaborado por Anaïs Gibert y Charlotte Jean

