Los beneficios de la cúrcuma
Una especia llena de virtudes
Base de la gastronomía y de la medicina tradicional india, esta especia de color amarillo anaranjado posee numerosas virtudes. La cúrcuma es un rizoma beige del tamaño de un dedo pequeño, que revela su bello color naranja cuando se corta. Se consume fresca o seca en platos cocinados, en infusión o en remedios naturales.
Esta raíz posee efectos antioxidantes y antiinflamatorios reconocidos. Es uno de los antiinflamatorios naturales conocidos más potentes. Por ello, se utiliza de forma preventiva para mantenerse sano y reforzar las defensas inmunitarias, y para tratar dolores y pequeños malestares. La cúrcuma es particularmente buena para tratar los trastornos digestivos, para mejorar la función biliar y para tratar las enfermedades inflamatorias. Se recomienda para aliviar los dolores articulares como la artrosis y la artritis. Incluso podría tener virtudes anticáncer debidas a sus activos antioxidantes, especialmente la curcumina.
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Un consumo diferente según los países
La cúrcuma se consume tradicionalmente en Asia, sobre todo en India, donde esta especia es central. Este consumo diario explicaría además que los indios presenten una tasa de cánceres del sistema digestivo particularmente baja en comparación con los occidentales.
En Occidente, la cúrcuma se consume como superalimento: puede añadirse a los platos como especia o tomarse en cura. Se puede consumir fresca, seca en polvo o en cápsulas. Se aconseja consumir 3 gramos de polvo al día o, en cápsulas (extracto seco), 1,5 gramos al día.
¿La cúrcuma sería peligrosa?
Espolvorear cúrcuma sobre los platos sería inútil
La dosis recomendada de cúrcuma para un efecto terapéutico es bastante alta: habría que consumir más de una cucharadita al día. Además, la cúrcuma es bastante volátil y el organismo la asimila con dificultad. Conviene combinar la cúrcuma con pimienta (o más bien con su principio activo, la piperina) para que sus efectos sean realmente eficaces.
Además, se recomienda consumir la cúrcuma con aceite para ‘fijar’ sus sustancias activas en el organismo. Aprovechar los efectos terapéuticos de la cúrcuma es, por tanto, bastante difícil: espolvorear unas pizcas sobre los platos de vez en cuando no sería suficiente para mantenerse sano (¡pero al menos permite teñirlos de amarillo!).
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Efectos indeseables de la cúrcuma y contraindicaciones
Tomada en pequeñas dosis, la cúrcuma no presenta ningún peligro para el organismo. Sin embargo, consumida en altas dosis, la cúrcuma puede provocar efectos en el sistema digestivo. Un organismo no acostumbrado al consumo diario de cúrcuma puede sufrir ardores de estómago, hinchazón e incluso vómitos.
Como especia, la cúrcuma no es peligrosa para la salud. Es al tomarse en cápsulas o en extractos cuando puede producirse una sobredosis.
Si la cúrcuma es excelente para aliviar las reglas dolorosas o los sangrados excesivos, está desaconsejada en tratamientos para mujeres embarazadas o en periodo de lactancia. En efecto, podría provocar, a altas dosis, hemorragias o contracciones.
La cúrcuma está contraindicada en caso de cálculos biliares, enfermedades del hígado y úlceras de estómago. También se desaconseja consumirla en dosis altas si va a ser operado/a en los próximos 15 días, ya que la cúrcuma puede aumentar el flujo sanguíneo.
Finalmente, se puede desarrollar una alergia a la cúrcuma, que se manifiesta por sequedad de boca y náuseas. Por eso se aconseja, en la primera toma, tomar solo una pequeña pizca, sobre todo en personas que ya presentan alergias a otros alimentos.
Interacciones de la cúrcuma
La cúrcuma puede ver multiplicados sus efectos con el consumo de plantas o medicamentos. Así, para asimilar mejor la cúrcuma, se aconseja consumirla en interacción con la pimienta. También se sugiere consumir cúrcuma con jengibre o canela para multiplicar sus efectos antiinflamatorios.
En cambio, se desaconseja consumir la cúrcuma con ciertos medicamentos :
- Los anticoagulantes : aspirina, warfarina (Coumadine), antivitamina K: la cúrcuma ya posee un efecto anticoagulante que puede acentuar las propiedades del medicamento.
- Antiácidos : se utilizan en personas que sufren de acidez gástrica, de reflujo gastroesofágico. La cúrcuma podría anular los efectos del medicamento, e incluso aumentar las secreciones ácidas.
- Antidiabéticos : la cúrcuma, al poseer ya efectos antidiabéticos, no se recomienda consumir cúrcuma en dosis altas si se sigue un tratamiento contra la diabetes.
- Antiinflamatorios : del mismo modo, la cúrcuma debe evitarse si ya se consumen medicamentos antiinflamatorios. Sin embargo, algunos estudios muestran que la cúrcuma puede ser más eficaz que los antiinflamatorios no esteroideos, sin efectos secundarios perjudiciales para el organismo.
Por tanto, si se consumen este tipo de medicamentos, se aconseja consultar al médico antes de iniciar un tratamiento a base de cúrcuma. No obstante, unas pocas pizcas de polvo en la comida no causarán problemas.
La opinión de los expertos sobre el consumo de cúrcuma
Así, la cúrcuma no es peligrosa si se consume de forma ocasional, o si se respetan las dosis prescritas por un profesional. Un consumo puntual de cúrcuma no tendrá ningún efecto nocivo en el organismo: como mucho, será inútil porque no será asimilada por el cuerpo.
Si desea seguir una cura a base de cúrcuma para aliviar trastornos digestivos o dolores articulares, se aconseja pedir el parecer de un especialista. Una sobredosis de cúrcuma puede provocar efectos contrarios a los buscados.
Sin embargo, este tipo de remedio natural es menos propenso a tener efectos secundarios que un tratamiento farmacológico.
