Como su nombre indica, un antiespasmódico es un producto que permite combatir y aliviar los espasmos musculares involuntarios, generalmente localizados a nivel digestivo, e incluso urinario en algunos casos.
¿Sabe usted esas contracciones intensas a menudo dolorosas y frecuentemente acompañadas de otros síntomas: estreñimiento, diarrea, hinchazón y flatulencias?
En el lenguaje común, los antiespasmódicos designan medicamentos prescritos o que se pueden comprar en la farmacia sin receta. Pero también es posible reducir la intensidad de estos espasmos de forma natural.
Descubra estos 8 antiespasmódicos naturales, plantas y aceites esenciales, mis consejos para usarlos y limitar los dolores abdominales y los espasmos.
1. La cúrcuma
La cúrcuma posee propiedades antiespasmódicas y analgésicas gracias a su riqueza en curcumina, lo que permite la relajación de los músculos lisos.
En general, esta especia es conocida por facilitar la digestión, como indica este estudio.
Al favorecer la producción de bilis, la cúrcuma actúa sobre el estreñimiento, y también ayuda a expulsar los gases.
Puede tomarlo en forma de complementos alimenticios o añadiendo hasta una cucharadita en un plato. Le aconsejo asociarlo a una fuente de grasa para facilitar su absorción.
Tenga en cuenta que las infusiones de cúrcuma no son útiles, los compuestos activos son lipófilos y no se mezclan con el agua.
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2. El magnesio
El magnesio es uno de los minerales más importantes del cuerpo humano según este estudio. Una de sus funciones es ayudar al funcionamiento normal del sistema nervioso y de los músculos, y desempeña un papel importante en la contracción muscular.
En caso de deficiencia de magnesio, es posible sufrir contracciones musculares involuntarias: espasmos. De hecho, a menudo se relaciona un párpado que tiembla con un déficit de magnesio.
Para limitar la aparición de espasmos digestivos, aporte regularmente magnesio a su organismo mediante complementos alimenticios o a través de la alimentación: chocolate, frutos secos, algunas aguas minerales, legumbres.
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3. La manzanilla
Algunos estudios muestran que la manzanilla alemana, o matricaria (Matricaria recutita), tiene propiedades espasmolíticas, especialmente al inhibir enzimas fosfodiesterasas que desempeñan numerosas funciones moduladoras.
Le recomiendo usarlo en infusión o en su forma de aceite esencial para una mayor concentración de principios activos.
4. El aceite esencial de anís estrellado
El aceite esencial de anís estrellado (Illicium verum) posee virtudes antiespasmódicas que lo convierten en un aliado contra los dolores intestinales, como se resume en esta publicación.
Generalmente se recomienda para los problemas de estómago y la aerofagia por sus funciones antiinflamatorias.
Al poseer moléculas fitoestrogénicas similares a nuestras hormonas humanas, debe evitarse en personas con un cáncer hormono-dependiente.
5. El aceite esencial de bergamota
La bergamota no es solo un cítrico que se encuentra en el té Earl Grey. También es un fruto cuyo aceite esencial (Citrus Bergamia) posee propiedades antiespasmódicas, estudiadas en estas investigaciones.
Este aceite esencial sería especialmente interesante para aliviar a los pacientes con síndrome del intestino irritable, actuando particularmente sobre el estreñimiento por su acción laxante.
6. El aceite esencial de lavanda verdadera
El aceite esencial de lavanda verdadera (Lavandula angustifolia) es un imprescindible en el botiquín de aromaterapia del hogar, ya que posee numerosos beneficios.
Entre sus acciones, la lavanda verdadera actúa a nivel digestivo como antiespasmódico. Al respecto, le invito a leer esta publicación.
¿Su mecanismo de acción? La presencia del compuesto bioactivo linalol actúa sobre el AMPc (monofosfato de adenosina cíclico), implicado en la contracción muscular.
7. El aceite esencial de romero
El aceite esencial de romero (rosmarinus officinalis), conocido por ayudar a combatir el estrés y estimular la memoria, también tiene efectos sobre los dolores de estómago gracias a su acción antiespasmódica.
Sus compuestos actúan sobre los receptores noradrenérgicos, implicados en la activación del sistema simpático y en la contracción muscular involuntaria. Al actuar sobre los receptores, las contracciones intestinales se reducen, al igual que el malestar que ello provoca.
8. El aceite esencial de menta piperita
La menta piperita (minta piperita) es una de las soluciones naturales más conocidas para combatir los síntomas de la colopatía funcional o síndrome del intestino irritable, como pude descubrir en este estudio.
A menudo se recomienda contra los dolores abdominales por su efecto antiespasmódico, así como para la distensión abdominal y las flatulencias gracias a sus propiedades carminativas.
Su mecanismo de acción es similar al de la lavanda verdadera.
Mis consejos para usar los aceites esenciales antiespasmódicos
Usar aceites esenciales está bien, pero es necesario saber manejarlos. Entre las dosis, las mezclas y las diferentes aplicaciones, les explico cómo utilizar las famosas AE sin riesgo.
Los aceites esenciales (AE) son productos naturales potentes:
- Respete las recomendaciones de los fabricantes así como las contraindicaciones, especialmente en la mujer embarazada y el niño.
- Realice una prueba de alergia en el pliegue del codo 24 horas antes del uso para evitar una mala reacción.
- Puede aplicarlas de forma cutánea combinándolas con un masaje en la zona afectada, para unir lo útil con lo agradable (tienen la capacidad de atravesar las capas epidérmicas)
- Mezcle 3 a 4 gotas del aceite esencial de su elección con aceites vegetales: avellana, macadamia, almendra dulce
- Puede utilizar los aceites esenciales en sinergia, realizando mezclas: aceite esencial de hinojo, salvia esclarea y manzanilla, por ejemplo. Asegúrese de la compatibilidad entre los diferentes aceites.
En caso de duda, pida consejo a un profesional de la salud.
Mis trucos para limitar sus dolores abdominales y evitar los espasmos
Algunos otros remedios naturales actúan directa o indirectamente sobre los espasmos intestinales y pueden ayudarle a disminuir el dolor:
- el carbón activo limita la aerofagia y alivia los gases
- algunas posturas de yoga son conocidas por mejorar la digestión y reducir la hinchazón (torsión de la espalda, postura del gato y de la vaca, liberación de gases, etc.)
- los cataplasmas de arcilla verde alivian los dolores de estómago por sus propiedades antiinflamatorias
- la termoterapia (baño caliente o aplicación de una bolsa de agua caliente sobre el vientre) tiene un efecto antiespasmódico por sus propiedades vasodilatadoras.
Por supuesto, no haga todo a la vez. No estoy segura de que un cataplasma de arcilla verde en el vientre, en un baño caliente haciendo la postura del gato sea la manera más eficaz (y segura) de librarse de sus dolores.
