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Fechamos los trastornos alimentarios femeninos en los años 1970, cuando surge la dictadura de la delgadez, pero la exigencia, para las mujeres, de rodearse de comida sin comerla es mucho más antigua.
Pandora debe ocultar su «estómago de perra» en un cuerpo perfecto, Eva está condenada a someterse a todos los deseos masculinos por haber mordido la manzana; en el siglo XVII los primeros cafés parisinos servían para comer pero las mujeres estaban excluidas…
Las mujeres son presentadas como amas de casa o glotonas, mientras que los hombres son chefs o gourmets.
¿Qué se esconde detrás de este gran banquete desigual? ¿Y somos muchas las que atravesamos lo que hoy llamamos, lacónicamente, TCA (trastornos de la conducta alimentaria)?
¿Por qué motivos? ¿Y cómo salir de ellos?
Ese es el tema del relato-investigación apasionante, intenso y sincero de Lauren Malka, una escritora que parece sentir las mismas cosas que nosotras. Un ensayo titulado «Mangeuses», publicado en octubre de 2023 por la editorial Les Pérégrines.
La invitada: Lauren Malka
Lauren Malka es periodista y podcaster (así que siento un poco de presión). Colabora, en particular, con Causette y con Les Epicurieux.
Ha escrito y correalizado un documental, «La France aux fourneaux», y ha participado en cuatro antologías feministas, entre ellas «Ceci est mon corps» y «Survivre au sexisme ordinaire».
Foto © NB
Mis preguntas
- Lauren, citas un número incalculable de autoras maravillosas en tu texto, como Colette, Virginia Woolf, Ursula Le Guin, Simone Weil, Geneviève Brisac, Margaret Arwood, Simone de Beauvoir, Helène Cixous. Da la impresión de estar entre amigas; es un gran collar que nos podemos poner para reconfortarnos. ¿Es la misma lengua la que nos servirá para hablar mejor / inventar el relato que falta / salir del stript dominante y para comer mejor?
- Citas en epígrafe una frase de Naomi Wolf: «Una cultura centrada en la delgadez femenina no es una obsesión por la belleza femenina, sino una obsesión por la obediencia femenina. La dieta es uno de los sedantes políticos más poderosos en la historia de las mujeres; una población que está enfadada en silencio es una población dócil.» ¿Puedes explicarnos el vínculo que estableces entre el patriarcado y los trastornos alimentarios de las mujeres?
- ¿No son las madres a menudo partícipes de estas imposiciones? Me parece que el patriarcado también sabotea las relaciones entre madres e hijas en ese sentido.
- Mencionas las restricciones y la incorporación de normas que pesan sobre nuestros cuerpos desde la Antigüedad, tanto en la incitación a la privación como en la exaltación de ciertas grasas. ¿Puedes explicarnos estas dos caras de la misma moneda?
- ¿Se limitan entonces las mujeres a escribir y comentar? ¿A soñar con comidas imaginarias con Virginia Woolf y con una gastronomía protofeminista con monjas audaces? ¿Qué es una escritura feminista de la cocina?
- Háblanos del miedo a engordar que asocias al miedo a crecer y a ocupar plenamente tu lugar como mujer.
- ¿Qué relación hay con la gordofobia?
- ¿Y los dénivores? (¡ah, la negación!)
- ¿La apropiación milenaria de los recursos alimentarios por parte de los hombres podría haber contribuido a las diferencias morfológicas entre hombres y mujeres?
- ¿Una palabra sobre la anorexia y la bulimia, trastornos alimentarios como lenguaje de resistencia?
- Y para concluir, ¿cómo salvarse compartiendo el pan de la sororidad? ¿Cómo dar la vuelta a los estigmas y reapropiarse de la gula y del placer? ¿Cómo, para citarte, devolver al remitente las tartas que hemos recibido durante siglos?
