Retención de líquidos: los complementos alimenticios más eficaces

La retención de líquidos, o edema, se caracteriza por una acumulación excesiva de líquido en los tejidos corporales, especialmente en las extremidades inferiores, el abdomen o el rostro. Puede producirse en los espacios intersticiales (alrededor de las células) o en las cavidades corporales (en el abdomen). rnrnNormalmente, el equilibrio de los fluidos se mantiene gracias a un sistema complejo que implica los vasos sanguíneos, el sistema linfático y los riñones, pero este equilibrio puede verse alterado por diversos factores.

Causas principales

Las causas de la retención de líquidos son múltiples, entre las que se incluyen: rnrn• Disfunción renal: incapacidad para excretar correctamente el exceso de sodio y de agua.rnrn• Insuficiencia cardiaca: reducción de la eficacia de bombeo del corazón, que provoca una acumulación de líquido.rnrn• Enfermedades hepáticas: como la cirrosis, que provocan acumulación de líquido en el abdomen.rnrn• Desequilibrios hormonales: que implican la aldosterona o la vasopresina, que regulan la retención de sodio y agua, pero también otras hormonas según contextos específicos como el embarazo o el ciclo menstrual. Por ejemplo, las fluctuaciones de los estrógenos y de la progesterona a lo largo del ciclo menstrual aumentan la permeabilidad capilar y modifican el metabolismo del sodio.rnrn• Embarazo: la compresión de las venas abdominales puede provocar edema.rnrn• Sedentarismo o permanecer de pie durante mucho tiempo: que favorecen la acumulación en las piernas.

Síntomas

Los síntomas varían según la gravedad y la localización de la retención de líquidos: rnrn• Hinchazones visibles (tobillos, piernas, abdomen, rostro).rnrn• Sensación de pesadez o tensión.rnrn• Disminución de la movilidad articular.rnrn• Aumento de peso rápido e inexplicable.rnrn• En los casos graves, falta de aliento o molestias torácicas.

Factores de riesgo

• Dietas ricas en sodio.rnrn• Sedentarismo o permanecer mucho tiempo en la misma posición.rnrn• Consumo excesivo de alcohol.rnrn• Medicamentos como corticosteroides, anticonceptivos o antihipertensivos.

Soluciones naturales

La fitoterapia ofrece una variedad de plantas con acciones suaves pero eficaces para manejar la retención de líquidos. Favorecen la eliminación del exceso de líquido al mismo tiempo que apoyan una mejor circulación sanguínea y linfática. Por ejemplo, el diente de león (Taraxacum officinale) es conocido por sus propiedades diuréticas, que estimulan la eliminación de agua y sodio. La cola de caballo (Equisetum arvense), además de drenar los líquidos, aporta minerales esenciales para mantener el equilibrio hídrico. El orthosiphon mejora la función renal y facilita la eliminación de toxinas.rnrnOtras plantas, como el rusco (Ruscus aculeatus), resultan especialmente eficaces para reducir los edemas al estimular la circulación venosa. Por último, la vid roja (Vitis vinifera) refuerza las paredes venosas, limitando así las hinchazones asociadas a una insuficiencia venosa crónica.rnrnEstas plantas actúan mediante diversos mecanismos complementarios. Su efecto diurético favorece una mejor filtración renal, permitiendo eliminar el agua retenida. También mejoran la circulación sanguínea, reduciendo las fugas capilares responsables de las hinchazones. Además, sus propiedades antiinflamatorias calman las zonas afectadas por los edemas, complementadas por propiedades antioxidantes que protegen los tejidos frente a los daños relacionados con el estrés oxidativo.rnrn