Infecciones bucodentales: complementos alimenticios más eficaces

Las infecciones bucodentales, como la gingivitis o las aftas, son frecuentes y pueden afectar las encías, la lengua y las mejillas. A menudo se deben a una higiene bucodental insuficiente, un cepillado demasiado agresivo o al uso de cepillos de cerdas duras. Las personas diabéticas o inmunodeprimidas son particularmente vulnerables. Los síntomas incluyen enrojecimiento, dolor, sangrado de las encías y, a veces, ulceraciones o una molestia generalizada en la boca. La gingivitis, por ejemplo, resulta de una inflamación de las encías, a menudo debida a una proliferación bacteriana, mientras que las micosis bucales son causadas por hongos. Para aliviar estas infecciones, se recomienda el uso de oligoelementos como el cobre y la plata. Pueden emplearse en forma de enjuagues bucales, a razón de tres veces al día durante 15 días. Una buena higiene bucodental, junto con consultas regulares con el dentista, sigue siendo esencial para prevenir estas afecciones y mantener una buena salud bucal.