Ozempic®, nuevo tratamiento contra la diabetes de tipo 2 (que forma parte de los agonistas del GLP-1), se propone cada vez con más frecuencia. De hecho, sus indicaciones también se han ampliado a el abordaje de la obesidad y el sobrepeso.
El GLP-1 es una hormona digestiva que aumenta la saciedad y ayuda a regular la glucemia. Las personas que padecen obesidad la secretan a menudo en menor cantidad después de las comidas. Tratamientos como Ozempic® imitan esta hormona y ofrecen un efecto más estable y duradero, lo que explica su administración semanal (una inyección por semana).
Atraídos por las promesas de una pérdida de peso rápida, muchos pacientes desconocen que el inicio de un tratamiento con Ozempic® va a menudo acompañado de efectos digestivos. A veces estos son muy marcados.
Es totalmente normal: estos mecanismos están estrechamente relacionados con la propia acción del GLP-1 sobre el estómago y la sensación de saciedad.
Si vas a empezar o acabas de empezar este tratamiento, si te haces preguntas sobre sus efectos secundarios, ¡estás en el lugar adecuado! Hago balance de estos efectos, su duración, y te doy mis consejos para gestionarlos lo mejor posible.
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Efectos adversos más frecuentes durante un tratamiento con Ozempic®
Inicio del tratamiento: una etapa clave
El tratamiento consiste en una inyección por semana con un bolígrafo precargado en el abdomen, la parte superior del muslo o la parte superior de los brazos.
El paciente empieza con la dosis más baja, que por lo general se aumenta después de las primeras 4 semanas de tratamiento, y se vuelve a aumentar después de otras 4 semanas de tratamiento si tu médico lo considera necesario.
Efectos más habituales: los efectos digestivos
Los efectos adversos más frecuentemente observados al inicio de la toma de Ozempic® son principalmente efectos de orden gastrointestinal y, en particular, una aparición muy frecuente según el prospecto de uso de náuseas y diarrea, y una aparición frecuente de vómitos, dolores abdominales y distensión abdominal, estreñimiento, reflujo y flatulencias.
Algunas personas también observan una disminución del apetito muy significativa con una sensación importante de saciedad.
Estos efectos aparecen generalmente al inicio del tratamiento o tras el aumento de la dosis. Deberían ser pasajeros y atenuarse progresivamente durante el mes siguiente al inicio del tratamiento o al aumento de la dosis.
Efectos no digestivos que suelen observarse
También se observan con frecuencia mareos, dolores de cabeza y cansancio. Estos síntomas aparecen sobre todo al inicio del tratamiento, mientras el cuerpo se adapta.
A menudo están relacionados con una disminución del apetito, con una hidratación insuficiente o con variaciones de la glucemia. En la mayoría de los casos, siguen siendo transitorios y disminuyen una vez que la dosis se ha estabilizado.
Efectos secundarios poco frecuentes pero que deben vigilarse
Otros efectos adversos poco frecuentes a raros pueden aparecer: pancreatitis aguda, reacción alérgica grave, afección ocular, obstrucción intestinal.
Se recomienda consultar a su médico en caso de:
- dolor persistente en el estómago o en la espalda
- cambio en la visión
- problemas respiratorios, hinchazón de la cara, los labios, la lengua y/o la garganta, con dificultad para tragar y aumento de la frecuencia cardíaca
- estreñimiento grave asociado a otros síntomas digestivos como dolor de estómago, hinchazón, vómitos
Pero ¡sin pánico! Según esta revisión de la literatura, la mayoría de estos nuevos tratamientos son seguros y los que contienen semaglutida, como Ozempic®, se encuentran entre los más seguros.
En cualquier caso, le recomiendo consultar a su médico si lo considera necesario.
Mis consejos para manejar los efectos adversos de Ozempic® (y otros agonistas del GLP1)
Aquí tiene mis consejos como dietista para ayudarle a sobrellevar mejor los efectos secundarios que pueden aparecer al inicio del tratamiento o al aumentar la dosis:
- Seguir bien las recomendaciones médicas y aumentar progresivamente la dosis del tratamiento
- Fraccionar las comidas: prever cantidades más pequeñas, aunque haya que comer con más regularidad
- Evitar los alimentos demasiado grasos y demasiado azucarados que pueden aumentar las náuseas y priorizar comidas que se consuman frías, con pocos olores, si es necesario
- Hidratarse suficientemente entre las comidas, especialmente en caso de vómitos o diarrea
- Masticar bien para facilitar la digestión.
- No dudar en recurrir a los antieméticos recetados si las molestias ocasionadas por el tratamiento son demasiado importantes
- Confiar en la opinión médica de su prescriptor, que podrá reevaluar su tratamiento
Fuentes y estudios científicos
Resumen de las características del producto y prospecto de Ozempic
McGowan B, Ciudin A, Baker JL, Busetto L, Dicker D, Frühbeck G, Goossens GH, Monami M, Sbraccia P, Martinez-Tellez B, Woodward E, Yumuk V. 2025. Revisión sistemática y metaanálisis de la eficacia y la seguridad de los tratamientos farmacológicos para la obesidad en adultos

